El corto está de moda. No hay más que fijarse en el gran número de festivales y concursos que existen por la geografía nacional e internacional. Y más si cabe ahora que un cortometraje del español Nacho Vigalondo fue nominado en los Oscar, y otro corto (proyecto fin de carrera en una escuela de cine de Barcelona) ha ganado en el famoso Festival de Sundance.
Se llama LA RUTA NATURAL de Álex Pastor; Es original desde el título, ya que es un palíndromo y además la historia está contada hacia atrás, es una maravilla de 10 minutos de duración que fue finalista en los Goya 2005 (no entiendo por qué no ganó), aunque ha conseguido más de 60 premios por todo el mundo y poco a poco se va conociendo gracias a promociones como la de la revista Fotogramas que el mes pasado regaló un DVD con los mejores cortos de su concurso (donde tampoco venció LA RUTA NATURAL, por cierto).
Muchos de los reconocidos directores comenzaron haciendo sus pinitos en el mundo del cortometraje: Alejandro Amenábar, Achero Mañas y más recientemente, Daniel Sánchez Arévalo son ejemplos de que para ser un buen director de largometrajes hay que empezar poco a poco. Lástima que no se les puede dar tanta publicidad por el problema de la distribución, aunque tal vez podrían verse justo antes de las películas en vez de tanta publicidad y así la gente conocería algo más de este mundo, que hay cosas muy interesantes.
En definitiva, los cortos son una experiencia genial para los jóvenes aprendices del oficio del cine, sobre todo si luego se nos da una oportunidad para demostrar que el cine en España no está tan mal y aquí también podemos hacer buenas películas y tenemos peores estudios y menos dinero, pero mejores ideas que en Hollywood.
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